
Hubo una época de mi vida en la que solía dormir de tres a cinco horas por noche. Estaba todo el día en el set y toda la noche en el estudio, y los fines de semana hacía giras y grababa videos. Tenía más de 20 años y me creía invencible, comentó.
Sin embargo, JLo tuvo un cambio de actitud después de que su estilo de vida la llevó a sufrir un ataque de pánico paralizante.
Estaba sentada en una caravana con todo el trabajo y el estrés que conlleva y junto con la falta de sueño para recuperarme mentalmente, me afectó. Pasé de sentirme totalmente normal a pensar en lo que tenía que hacer ese día y, de repente, sentí que no podía moverme, recordó.
López dijo que estaba completamente congelada y que no sabía lo que estaba pasando.
No podía ver con claridad, y entonces los síntomas físicos que tenía empezaron a asustarme y el miedo se agravó. Ahora sé que se trataba de un clásico ataque de pánico provocado por el agotamiento, pero en aquel momento ni siquiera había oído el término, platicó.
López explicó que estaba aterrorizada cuando su guardia de seguridad la llevó al médico. Pensé que me estaba volviendo loca. Le pregunté al médico si me estaba volviendo loca, dijo.