

El exmonarca de 84 años, que se instaló en los Emiratos Árabes Unidos en agosto de 2020 entre sospechas de corrupción, llegó a España el jueves por la noche para una visita que concluirá el lunes y que levantó críticas en el país.
Pero en el puerto de la localidad gallega de Sanxenxo -donde este fin de semana asiste a una regata en la que participa el Bribón, velero con el que fue campeón del mundo-, decenas de curiosos lo aclamaron al grito de ¡Viva el rey!, ¡Viva España! y ¡Que vuelva, que vuelva!.
Desplazándose con la ayuda de un bastón y del brazo de un acompañante, el padre del actual rey, Felipe VI, saludó a los curiosos y posó ante los muchos fotógrafos congregados, pareciendo emocionado. No hizo declaraciones.
Juan Carlos I, que abdicó en 2014 perseguido por los escándalos, irá el lunes a Madrid para ver a su mujer Sofía, a su hijo Felipe VI, y al resto de la familia, antes de regresar a Abu Dabi.